Acaba de publicarse en Estados Unidos un libro dedicado a la Hipoxia Intermitente titulado "Intermittent Hypoxia: From Molecular Mechanisms to Clinical Applications" y en el que han participado75 científicos e investigadores de 17 paises, todos ellos expertos en diferentes aspectos de la Hipoxia Intermitente, sus bases, efectos, entrenamiento,... bajo la coordinación de los editores-autores Lei Xi y Tatiana Serebrovskaya.
Es un libro de 615 páginas enteramente escrito en inglés que tiene la particularidad de aportar la visión y el conocimiento que sobre la Hipoxia Intermitente tienen diferentes autores de la antigua Unión Soviética. Este aspecto cobra una gran importancia dado que en la antigua Unión Soviética y posteriormente en la CEI (Comunidad de Estados Independientes), la Hipoxia Intermitente y su utilización no sólo en el mundo del deporte, sino también a nivel espacial y hospitalario han tenido su máximo desarrollo; ello, junto con las numerosas investigaciones realizadas, les da una gran autoridad en cuanto al conocimiento. Además, hasta el momento la mayor parte de este conocimiento no ha sido publicado en inglés, por lo que ese conocimiento no se ha transmitido a la mayoría de la comunidad científica internacional.
lunes, 15 de marzo de 2010
domingo, 3 de agosto de 2008
La cafeina no solo mejora el rendimiento fisico, sino que tambien puede mejorar la recuperacion
La utilizacion de la cafeina en el mundo del deporte, siempre ha ido dirigido a una mejora del rendimiento fisico, y su uso estaba basado en 2 características:
1. La cafeina tiene un efecto estimulante sobre el sistema nervioso, y por ello hay deportistas que utilizan la cafeina antes del ejercicio fisico con el objetivo de activarse, estimularse, disminuir la sensacion de fatiga y con todo ello mejorar el rendimiento. La cafeina es de esta forma utilizada por algunos deportistas que compiten en prácticamente cualquier disciplina, desde la velocidad hasta el fondo. Sus efectos reales en este sentido pueden considerarse variables y pudiera ser que existieran grandes variaciones individuales.
2. La cafeina tiene un efecto lipolítico, con lo que aumenta la 'suelta' de acidos grasos desde el tejido graso al torrente sanguíneo. Este aumento de ácidos grasos libres en sangre, permite que en el curso del ejercicio físico la célula muscular aumente la obtención de energía en base a la utilización de grasa y con ello sea capaz de economizar el glucógeno muscular utilizado. Dado que en disciplinas de fondo el glucógeno muscular puede ser un factor limitante del rendimiento debido a su agotamiento, el hecho de que se hayan utilizado más grasas en la obtención de energía, permite mantener durante más tiempo el glucógeno mucular utilizable, mejorando el rendimiento. En base a este efecto la cafeina se ha utilizado en gran medida por deportistas que participan en pruebas de larga duración, y si bien en algunos casos individuales no parece aumentar significativamente el rendimiento, en la mayoría de los casos sí que aumenta el rendimiento. Incluso en alguna publicación se puede ver alguna tabla de mejora de tiempos por la utilización de cafeina en la prueba de maraton.
Hasta ahora en mayor o menor medida, todos conocíamos los efectos anteriores de la cafeina, pero lo que nos ha sorprendido es la noticia aparecida en la web de Biolaster, que basada en un estudio publicado en el Journal of Applied Physiology titulan La Cafeina mejora la Recuperacion del Glucogeno Muscular. Según este estudio el hecho de incluir cafeina e hidratos de carbono en la recuperación tras un ejercicio de fondo extenuante (que ha supuesto el agotamiento de los depósitos de glucógeno), da lugar a una mejora muy importante en la recuperación de dichos depósitos al cabo de 4 horas de recuperación (hasta un 66% de mejora). La dosis de cafeina utilizada es realmente muy elevada para lo que es habitual en el medio deportivo (han utilizado 8 mg/kg de peso, que en un deportista de 70 kg sería una dosis de 560 mg, cifra realmente elevada) y pudiera interferir en el descanso. Es por ello que ahora los investigadores van a comprobar si con menores dosis de cafeina pueden conseguirse efectos similares aunque no sean tan espectaculares. Si fuera así, quizá habría que incluir alguna bebida de cola muy conocida en la recuperación de los ejercicios de fondo, bebida que en estos momentos aparece como proscrita para muchos expertos en medicina deportiva. Por tanto, se ha abierto una nueva vía hasta ahora impensable en la mejora de la recuperación tras esfuerzo.
1. La cafeina tiene un efecto estimulante sobre el sistema nervioso, y por ello hay deportistas que utilizan la cafeina antes del ejercicio fisico con el objetivo de activarse, estimularse, disminuir la sensacion de fatiga y con todo ello mejorar el rendimiento. La cafeina es de esta forma utilizada por algunos deportistas que compiten en prácticamente cualquier disciplina, desde la velocidad hasta el fondo. Sus efectos reales en este sentido pueden considerarse variables y pudiera ser que existieran grandes variaciones individuales.
2. La cafeina tiene un efecto lipolítico, con lo que aumenta la 'suelta' de acidos grasos desde el tejido graso al torrente sanguíneo. Este aumento de ácidos grasos libres en sangre, permite que en el curso del ejercicio físico la célula muscular aumente la obtención de energía en base a la utilización de grasa y con ello sea capaz de economizar el glucógeno muscular utilizado. Dado que en disciplinas de fondo el glucógeno muscular puede ser un factor limitante del rendimiento debido a su agotamiento, el hecho de que se hayan utilizado más grasas en la obtención de energía, permite mantener durante más tiempo el glucógeno mucular utilizable, mejorando el rendimiento. En base a este efecto la cafeina se ha utilizado en gran medida por deportistas que participan en pruebas de larga duración, y si bien en algunos casos individuales no parece aumentar significativamente el rendimiento, en la mayoría de los casos sí que aumenta el rendimiento. Incluso en alguna publicación se puede ver alguna tabla de mejora de tiempos por la utilización de cafeina en la prueba de maraton.
Hasta ahora en mayor o menor medida, todos conocíamos los efectos anteriores de la cafeina, pero lo que nos ha sorprendido es la noticia aparecida en la web de Biolaster, que basada en un estudio publicado en el Journal of Applied Physiology titulan La Cafeina mejora la Recuperacion del Glucogeno Muscular. Según este estudio el hecho de incluir cafeina e hidratos de carbono en la recuperación tras un ejercicio de fondo extenuante (que ha supuesto el agotamiento de los depósitos de glucógeno), da lugar a una mejora muy importante en la recuperación de dichos depósitos al cabo de 4 horas de recuperación (hasta un 66% de mejora). La dosis de cafeina utilizada es realmente muy elevada para lo que es habitual en el medio deportivo (han utilizado 8 mg/kg de peso, que en un deportista de 70 kg sería una dosis de 560 mg, cifra realmente elevada) y pudiera interferir en el descanso. Es por ello que ahora los investigadores van a comprobar si con menores dosis de cafeina pueden conseguirse efectos similares aunque no sean tan espectaculares. Si fuera así, quizá habría que incluir alguna bebida de cola muy conocida en la recuperación de los ejercicios de fondo, bebida que en estos momentos aparece como proscrita para muchos expertos en medicina deportiva. Por tanto, se ha abierto una nueva vía hasta ahora impensable en la mejora de la recuperación tras esfuerzo.
martes, 10 de junio de 2008
60 minutos de actividad física en los adolescentes para prevenir la hipertension arterial
El aumento del sedentarismo en la sociedad está trayendo consigo un cambio significativo en la salud de la población general, con un incremento de la proporción de obesidad, hipertensión arterial, diabetes,...
Una de las formas de hacer frente a estos 'deterioros' es la realización de actividad física frecuente, en lo que supone una recuperación de parte del estilo de vida de otras generaciones, en las que el esfuerzo físico estaba presente en muchas de las actividades laborales.
En una revista científica (Medicine and Science in Sports and Exercise) se acaba de publicar un artículo en el que han estudiado el comportamiento de 1100 niños y adolescentes (entre 8 y 17 años), objetivándose una relación (aunque sea modesta) entre la cantidad de ejercicio y la presión arterial en dicha población. Se concluye apoyando las recomendaciones sanitarias, en el sentido de que 60 minutos de actividad física vigorosa diaria, supone un estímulo que ayuda a controlar la tensión arterial dentro de límites normales.
lunes, 19 de mayo de 2008
El organismo humano, el ejercicio físico y la termoregulación
El organismo humano es homeotermo (mantiene una temperatura interna estable) a pesar de las variaciones que en este sentido tiene el medio exterior. Por ello existen una serie de mecanismos termo-regulatorios que permiten tanto la producción como la eliminación de calor, para de esta forma adaptarse correctamente al medio exterior y mantener la temperatura interna dentro de unos límites aceptables. De ahí que el hombre sea capaz de mantener su estabilidad térmica en ambientes fríos (como los paises nórdicos o árticos, aunque sea con ayuda de vestimenta) y también en ambientes calurosos como el desierto y los paises cercanos al ecuador.
Pero hay ocasiones en las que las necesidades fisiológicas chocan con aquello que queremos o tenemos que hacer. Me explico. En una situación de ejercicio físico o incluso en un ambiente caluroso, se produce una situación de choque debida a:
1. El hecho de que nos encontremos en un ambiente caluroso va a forzar los mecanismos de termo-regulación para que prime lo que es la eliminación de calor. Con ello aumenta la circulación de sangre a nivel de la piel para que de esta forma se elimine calor al medio, y
aumenta la transpiración para que con la evaporación del sudor se pierdan grandes cantidades de calor (la evaporación del sudor es el medio más eficiente que tiene el hombre para eliminar calor). Esta situación choca de alguna manera con las necesidades del ejercicio físico, ya que sangre que habitualmente va a la musculatura activa para aportar principalmente oxígeno para la producción de energía, es 'desviada' en este caso al territorio cutáneo y como consecuencia de ello se produce una disminución del rendimiento físico. Está bien documentada la disminución del rendimiento físico en pruebas de corte aeróbico (de media o larga duración) cuando la temperatura ambiente es elevada.
2. El ejercicio físico trae consigo un aumento de la utilización de energía química para convertirla en energía mecánica y con ello en movimiento. Pero la eficiencia de este cambio de forma de energía es relativamente baja; Sólo el 25% de la energía química se transforma en energía mecánica, y nada menos que un 75% es desaprovechada en ese intento de generar movimiento y se convierte en calor. De ahí que el ejercicio físico es una fuente de calor 'impresionante' y si bien en condiciones climatológicas frías es un gran aliado en el mantenimiento de la temperatura corporal (el erizamiento de los pelos de la piel supone un aumento del trabajo muscular y los escalofríos son otra forma de aumentar el trabajo muscular y con ello la generación de calor), cuando se trata de realizar ejercicio físico en condiciones de calor, se convierte en un elemento contrario a las necesidades de formación de energía del momento. Lo ideal en estas condiciones de calor sería disminuir al máximo posible el metabolismo, lo que supone estar en reposo; en este sentido hay recomendaciones por parte del Colegio Americano de Medicina del Deporte de que se suspendan las pruebas populares de atletismo de fondo (estilo medias maratones o incluso maratones) cuando las condiciones climáticas no sean benignas.
Cara a disminuir este 'choque' entre el deseo y los requerimientos fisiológicos, se establecen pautas referidas principalmente a cuidar la hidratación (con el fin de evitar la deshidratación que puede traer consigo la sudoración profusa), la vestimenta (con el fin de no impedir el intercambio de calor entre la piel y el medio),... Y en los últimos tiempos se están utilizando en el deporte de alta competición los llamados chalecos refrigerantes o cool vest, que permiten generar una especie de microclima alrededor del deportista. Tanto Nike con su anunciado Precool Vest que podemos ver en el blog de Vitonica, como ArcticHeat con su Cool Vest que comercializa en España Biolaster consiguen que la piel del tronco esté en contacto con una superficie fría, con lo que mejora de forma significativa la eliminación del calor por conducción, disminuyendo la necesidad de sudoración y mejorando el rendimiento.
Pero hay ocasiones en las que las necesidades fisiológicas chocan con aquello que queremos o tenemos que hacer. Me explico. En una situación de ejercicio físico o incluso en un ambiente caluroso, se produce una situación de choque debida a:
1. El hecho de que nos encontremos en un ambiente caluroso va a forzar los mecanismos de termo-regulación para que prime lo que es la eliminación de calor. Con ello aumenta la circulación de sangre a nivel de la piel para que de esta forma se elimine calor al medio, y
aumenta la transpiración para que con la evaporación del sudor se pierdan grandes cantidades de calor (la evaporación del sudor es el medio más eficiente que tiene el hombre para eliminar calor). Esta situación choca de alguna manera con las necesidades del ejercicio físico, ya que sangre que habitualmente va a la musculatura activa para aportar principalmente oxígeno para la producción de energía, es 'desviada' en este caso al territorio cutáneo y como consecuencia de ello se produce una disminución del rendimiento físico. Está bien documentada la disminución del rendimiento físico en pruebas de corte aeróbico (de media o larga duración) cuando la temperatura ambiente es elevada.
2. El ejercicio físico trae consigo un aumento de la utilización de energía química para convertirla en energía mecánica y con ello en movimiento. Pero la eficiencia de este cambio de forma de energía es relativamente baja; Sólo el 25% de la energía química se transforma en energía mecánica, y nada menos que un 75% es desaprovechada en ese intento de generar movimiento y se convierte en calor. De ahí que el ejercicio físico es una fuente de calor 'impresionante' y si bien en condiciones climatológicas frías es un gran aliado en el mantenimiento de la temperatura corporal (el erizamiento de los pelos de la piel supone un aumento del trabajo muscular y los escalofríos son otra forma de aumentar el trabajo muscular y con ello la generación de calor), cuando se trata de realizar ejercicio físico en condiciones de calor, se convierte en un elemento contrario a las necesidades de formación de energía del momento. Lo ideal en estas condiciones de calor sería disminuir al máximo posible el metabolismo, lo que supone estar en reposo; en este sentido hay recomendaciones por parte del Colegio Americano de Medicina del Deporte de que se suspendan las pruebas populares de atletismo de fondo (estilo medias maratones o incluso maratones) cuando las condiciones climáticas no sean benignas.
Cara a disminuir este 'choque' entre el deseo y los requerimientos fisiológicos, se establecen pautas referidas principalmente a cuidar la hidratación (con el fin de evitar la deshidratación que puede traer consigo la sudoración profusa), la vestimenta (con el fin de no impedir el intercambio de calor entre la piel y el medio),... Y en los últimos tiempos se están utilizando en el deporte de alta competición los llamados chalecos refrigerantes o cool vest, que permiten generar una especie de microclima alrededor del deportista. Tanto Nike con su anunciado Precool Vest que podemos ver en el blog de Vitonica, como ArcticHeat con su Cool Vest que comercializa en España Biolaster consiguen que la piel del tronco esté en contacto con una superficie fría, con lo que mejora de forma significativa la eliminación del calor por conducción, disminuyendo la necesidad de sudoración y mejorando el rendimiento.
sábado, 17 de mayo de 2008
Vestimenta que mejora el Rendimiento Deportivo mediante la mejora de la termoregulación
Como comento en otro post, el hecho de que el organismo humano sea homeotermo, exige un constante equilibrio entre la formación y eliminación de calor lo que en conjunto se denomina termo-regulación.
La realización de ejercicio físico de alta intensidad en condiciones ambientales adversas (calor y humedad elevados), está limitada debido a las necesidades de termo-regulación. Para intentar compensar esta limitación se ha intentado crear un microclima (tendríamos que hablar prácticamente de nanoclima, ya que sólo afecta a una parte del cuerpo humano) mediante la utilización de vestimentas que favorezcan la eliminación de calor.
En un principio se idearon una especie de chalecos o chaquetas con 'bolsillos' donde podía introducirse hielo, o los conocidos 'ice packs', de forma que esta chaqueta tenía una temperatura de 3 - 7º C y al contacto con la piel, permitía un rápido intercambio de calor que pasaba del organismo al ice pack. Estos chalecos iniciales tenían 2 problemas principales como eran el peso (andaban por encima de los 3 kgs) y el tiempo que mantenían la temperatura en niveles inferiores a 10º C que era limitado. El inicio de este sistema fue propugnado por el Instituto Australiano del Deporte, que es un ente público con subvenciones privadas que lidera el desarrollo del deporte de élite en Australia, incluyendo diferentes programas de investigación aplicada al deporte.
Una primera evolución de los chalecos refrigerantes dio lugar a prendas con menor peso; por ejemplo hay un chaleco francés llamado Cryo Vest fabricado por la empresa francesa SM Europe, que lleva packs denominados First Ice con una duración de más de 2 horas de mantenimiento de temperatura, con un peso de casi 2 kgs.
La última evolución tecnológica de diferentes materiales ha permitido un progreso significativo en este campo, liderado principalmente por una empresa también australiana como es ArcticHeat que ha conseguido fabricar un chaleco refrigerante (cool vest) con un peso de 800-1000 gramos una vez activado y con tiempos de mantenimiento de temperatura de más de 2 horas. Ello ha traido consigo que en las Olimpíadas cada vez haya habido más equipos olímpicos que han utilizado este tipo de prendas en la fase de calentamiento, con el fin de mejorar el rendimiento en competición. El hecho de que las Olimpíadas de Verano se estén celebrando últimamente en lugares calurosos y relativamente húmedos, está potenciando su uso; desde el comienzo de su utilización en Atlanta, ha aumentado el número de selecciones que los han utilizado en Sidney y más todavía en la última olimpíada de Atenas. Se espera que este año su uso en la Olimpíada de Beijing sea mayoritario.
Los chalecos refrigerantes (cool vest) están permitiendo mejorar el rendimiento en pruebas de corte aeróbico cuando las condiciones ambientales son adversas, y se puede esperar una mejora en torno al 1% en pruebas que tengan una duración del orden de 15 minutos, lo que supone entre 10 y 15 segundos en la prueba de 5000 metros.
En los últimos tiempos se está produciendo un avance muy importante en cuanto a la utilización y resultados de los chalecos refrigerantes (cool vest) y estoy convencido que de estar utilizándose en el calentamiento previo a la competición y en el período de recuperación, vamos a pasar a ver su utilización en el curso de algunas competiciones como puede ser el remo, el ciclismo en caso de pruebas contra el crono eminentemente llanas,...
Igualmente, la comercialización por parte de Nike de un chaleco refrigerante llamado "precool vest" va a generalizar el uso de estas prendas en el deporte de alto nivel con el fin de mejorar el rendimiento y más adelante pienso que también se va a generalizar su uso en el deporte popular como medida preventiva para evitar los problemas derivados del calor, como calambres, fatiga e incluso golpes de calor.
En este momento el precool vest de Nike parece que sólo está disponible para los deportistas de élite que tienen contrato con ellos, mientras que los chalecos refrigerantes (cool vest) de ArcticHeat están a la venta en España en la web de Biolaster.
La realización de ejercicio físico de alta intensidad en condiciones ambientales adversas (calor y humedad elevados), está limitada debido a las necesidades de termo-regulación. Para intentar compensar esta limitación se ha intentado crear un microclima (tendríamos que hablar prácticamente de nanoclima, ya que sólo afecta a una parte del cuerpo humano) mediante la utilización de vestimentas que favorezcan la eliminación de calor.
En un principio se idearon una especie de chalecos o chaquetas con 'bolsillos' donde podía introducirse hielo, o los conocidos 'ice packs', de forma que esta chaqueta tenía una temperatura de 3 - 7º C y al contacto con la piel, permitía un rápido intercambio de calor que pasaba del organismo al ice pack. Estos chalecos iniciales tenían 2 problemas principales como eran el peso (andaban por encima de los 3 kgs) y el tiempo que mantenían la temperatura en niveles inferiores a 10º C que era limitado. El inicio de este sistema fue propugnado por el Instituto Australiano del Deporte, que es un ente público con subvenciones privadas que lidera el desarrollo del deporte de élite en Australia, incluyendo diferentes programas de investigación aplicada al deporte.
Una primera evolución de los chalecos refrigerantes dio lugar a prendas con menor peso; por ejemplo hay un chaleco francés llamado Cryo Vest fabricado por la empresa francesa SM Europe, que lleva packs denominados First Ice con una duración de más de 2 horas de mantenimiento de temperatura, con un peso de casi 2 kgs.
La última evolución tecnológica de diferentes materiales ha permitido un progreso significativo en este campo, liderado principalmente por una empresa también australiana como es ArcticHeat que ha conseguido fabricar un chaleco refrigerante (cool vest) con un peso de 800-1000 gramos una vez activado y con tiempos de mantenimiento de temperatura de más de 2 horas. Ello ha traido consigo que en las Olimpíadas cada vez haya habido más equipos olímpicos que han utilizado este tipo de prendas en la fase de calentamiento, con el fin de mejorar el rendimiento en competición. El hecho de que las Olimpíadas de Verano se estén celebrando últimamente en lugares calurosos y relativamente húmedos, está potenciando su uso; desde el comienzo de su utilización en Atlanta, ha aumentado el número de selecciones que los han utilizado en Sidney y más todavía en la última olimpíada de Atenas. Se espera que este año su uso en la Olimpíada de Beijing sea mayoritario.
Los chalecos refrigerantes (cool vest) están permitiendo mejorar el rendimiento en pruebas de corte aeróbico cuando las condiciones ambientales son adversas, y se puede esperar una mejora en torno al 1% en pruebas que tengan una duración del orden de 15 minutos, lo que supone entre 10 y 15 segundos en la prueba de 5000 metros.
En los últimos tiempos se está produciendo un avance muy importante en cuanto a la utilización y resultados de los chalecos refrigerantes (cool vest) y estoy convencido que de estar utilizándose en el calentamiento previo a la competición y en el período de recuperación, vamos a pasar a ver su utilización en el curso de algunas competiciones como puede ser el remo, el ciclismo en caso de pruebas contra el crono eminentemente llanas,...
Igualmente, la comercialización por parte de Nike de un chaleco refrigerante llamado "precool vest" va a generalizar el uso de estas prendas en el deporte de alto nivel con el fin de mejorar el rendimiento y más adelante pienso que también se va a generalizar su uso en el deporte popular como medida preventiva para evitar los problemas derivados del calor, como calambres, fatiga e incluso golpes de calor.
En este momento el precool vest de Nike parece que sólo está disponible para los deportistas de élite que tienen contrato con ellos, mientras que los chalecos refrigerantes (cool vest) de ArcticHeat están a la venta en España en la web de Biolaster.
jueves, 17 de abril de 2008
Di Luca absuelto de la acusación de dopaje
La absolución por parte del CONI Italiano de Danilo Di Luca, renombrado ciclista profesional, que de una u otra forma ha estado en la picota desde hace casi un año, supone un respiro para el ciclismo profesional y por ende para el deporte de élite.
No hay duda alguna que los controles antidoping van perfeccionandose a lo largo de los años, pero siempre hay que tener un cuidado especial con las modificaciones que puedan existir en diferentes sustancias que aparte de poder mejorar el rendimiento pueden ser producidas por el propio organismo.
Este caso nos demuestra que cuando se trata de modificaciones en las concentraciones de algunas hormonas, hay que hilar mucho más fino de lo que se hace en la actualidad. Como decía, se ha avanzado mucho en la sistemática del control antidoping y la puesta en marcha de una prueba en base a isótopos radiactvos permite diferenciar con claridad (no sé si absoluta o no) los casos de modificaciones significativas en las concentraciones de testosterona (o del índice testosterona/epitestosterona) o de nandrolona (o de su metabolito). Pero ya vemos que cuando hablamos de otras hormonas, necesitamos mejorar el nivel de conocimiento y de análisis para llegar a resultados concluyentes.
En definitiva, estoy contento con este resultado que permite resarcir (en una mínima parte, es cierto) al mundo del deporte de competición y más específicamente al ciclismo de élite, del contínuo paralelismo que algunos intentan establecer entre doping y rendimiento.
No hay duda alguna que los controles antidoping van perfeccionandose a lo largo de los años, pero siempre hay que tener un cuidado especial con las modificaciones que puedan existir en diferentes sustancias que aparte de poder mejorar el rendimiento pueden ser producidas por el propio organismo.
Este caso nos demuestra que cuando se trata de modificaciones en las concentraciones de algunas hormonas, hay que hilar mucho más fino de lo que se hace en la actualidad. Como decía, se ha avanzado mucho en la sistemática del control antidoping y la puesta en marcha de una prueba en base a isótopos radiactvos permite diferenciar con claridad (no sé si absoluta o no) los casos de modificaciones significativas en las concentraciones de testosterona (o del índice testosterona/epitestosterona) o de nandrolona (o de su metabolito). Pero ya vemos que cuando hablamos de otras hormonas, necesitamos mejorar el nivel de conocimiento y de análisis para llegar a resultados concluyentes.
En definitiva, estoy contento con este resultado que permite resarcir (en una mínima parte, es cierto) al mundo del deporte de competición y más específicamente al ciclismo de élite, del contínuo paralelismo que algunos intentan establecer entre doping y rendimiento.
sábado, 5 de abril de 2008
Esta disminuyendo el doping en el deporte
El deporte de alta competición ha estado muy ligado a la utilización de métodos, medidas y sustancias con el fin de mejorar el rendimiento físico.
En un par de post anteriores, he hecho referencia a la utilización de vestimentas especiales destinadas a obtener mejores marcas, sobre todo en los deportes individuales, pero la mayor parte de las veces que hablamos de métodos, medidas y sustancias destinadas a la mejora del rendimiento estamos pensando en el doping.
El doping siempre ha existido y me imagino que seguirá existiendo porque en todos los ámbitos (no sólo en el deporte) intentamos por todos los medios ser mejores que los demás, con el fin de obtener reconocimiento social, mejores condiciones económicas, más poder,... y para ello la ética utilizada por cada uno puede ser diferente. En este sentido el doping en el deporte no debiera plantearse como algo muy diferente a otras prácticas que en el mundo de la empresa, de la política, del arte,... se consideran correctas. Sin embargo, eso no es así y a ello me he referido en algún post con anterioridad.
El tema de este post es que me ha llamado la atención la noticia publicada en un Blog de Ciclismo en relación a la Disminución de Casos Positivos en el ciclismo. Ya era hora de que en el tema del doping y ciclismo hubiera una noticia positiva que viera la luz. Según los datos que aparecen en dicho blog y que están basados en los publicados por la revista Wielermagazine utilizando datos de la propia UCI, se ha producido una disminución importantísima en el porcentaje de positivos en relación al total de muestras analizadas.
Si además de los datos que nos presentan nos adentramos un poco en los datos de la UCI, podemos decir que en el 2007 se han realizado más controles todavía (llegando a realizarse más de 6400 controles de orina) y que el número de positivos ha sido más bajo.
Vista la evolución, la UCI lo que sí que está realizando es aumentar de forma más significativa el número de controles fuera de competición, que de 152 controles de orina en 2006 han pasado a 1051 en 2007 y la previsión de la UCI es que en el curso de 2008 se realicen 2400 controles de orina fuera de competición.
A estos controles habría que añadir los que realizan directamente la AMA (Agencia Mundial Antidopaje), los que se realizan en las Olimpíadas y aquellos realizados por los Comités Antidopaje o Agencias Antidopaje Nacionales. No hay duda que los ciclistas no están a falta de control.
Y visto lo anterior, no estaría mal que los deportes de alta competición comenzaran a considerarse mucho más limpios que lo que nos transmiten algunos.
En un par de post anteriores, he hecho referencia a la utilización de vestimentas especiales destinadas a obtener mejores marcas, sobre todo en los deportes individuales, pero la mayor parte de las veces que hablamos de métodos, medidas y sustancias destinadas a la mejora del rendimiento estamos pensando en el doping.
El doping siempre ha existido y me imagino que seguirá existiendo porque en todos los ámbitos (no sólo en el deporte) intentamos por todos los medios ser mejores que los demás, con el fin de obtener reconocimiento social, mejores condiciones económicas, más poder,... y para ello la ética utilizada por cada uno puede ser diferente. En este sentido el doping en el deporte no debiera plantearse como algo muy diferente a otras prácticas que en el mundo de la empresa, de la política, del arte,... se consideran correctas. Sin embargo, eso no es así y a ello me he referido en algún post con anterioridad.
El tema de este post es que me ha llamado la atención la noticia publicada en un Blog de Ciclismo en relación a la Disminución de Casos Positivos en el ciclismo. Ya era hora de que en el tema del doping y ciclismo hubiera una noticia positiva que viera la luz. Según los datos que aparecen en dicho blog y que están basados en los publicados por la revista Wielermagazine utilizando datos de la propia UCI, se ha producido una disminución importantísima en el porcentaje de positivos en relación al total de muestras analizadas.
Si además de los datos que nos presentan nos adentramos un poco en los datos de la UCI, podemos decir que en el 2007 se han realizado más controles todavía (llegando a realizarse más de 6400 controles de orina) y que el número de positivos ha sido más bajo.
Vista la evolución, la UCI lo que sí que está realizando es aumentar de forma más significativa el número de controles fuera de competición, que de 152 controles de orina en 2006 han pasado a 1051 en 2007 y la previsión de la UCI es que en el curso de 2008 se realicen 2400 controles de orina fuera de competición.
A estos controles habría que añadir los que realizan directamente la AMA (Agencia Mundial Antidopaje), los que se realizan en las Olimpíadas y aquellos realizados por los Comités Antidopaje o Agencias Antidopaje Nacionales. No hay duda que los ciclistas no están a falta de control.
Y visto lo anterior, no estaría mal que los deportes de alta competición comenzaran a considerarse mucho más limpios que lo que nos transmiten algunos.
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